(Hoy día de las mujeres hondureñas)
Toma la sencillez siendo ella vida
y ofreciendo la luz como sus bellos ojos,
su linda mirada.
Voluntad a plenitud, su espejo es el bien,
como un lago de Yojoa que se regala a Honduras,
frugal da desde lo hondo de su ser
para aliviar el dolor violento del hambre y las carencias.
Como las abejas, del polen hace y pareciera que sólo gozara
de la dulzura de su mismo ser
y así eterniza lo breve de un prodigo instante
en la realización de una dicha necesaria
de los afanes de compartir.
Linda es una ciudadana de cada día,
de carne y hueso que vive con la clara convicción
de sus ideales de estar frente a ti,
a tu lado, dándote apoyo.
Cada día hace un alto y te dice
¿Cómo le va? ¿En qué le puedo ayudar?
Así de linda y libre a voluntad,
es la dicha de ser ella misma porque está con vos.
Alegría como la del Ángel de la Anunciación
y carácter de profeta son la levadura de su amistad.
Compromiso y compasión de servir
para que no haya congojas,
abre sus jardines.
La gracia de sus ojos comparte brillo de lealtad y amor,
mirándote,
mientras da una mano,
dos, ella entera, con la puntualidad del optimismo
y el respeto,
mientras te abre la puerta de su corazón
y te dice: pase, adelante,
qué alegría verle.
Linda, mujer hondureña,
Linda,
como un lago que inventa ríos
de canciones y frutos de paz,
déjame saludarte en tu día.
Tu amigo
Candelario Reyes García
25 de enero 2012.