Candelario Reves Garcia 2006
Todos somos igualmente humanos,
mordemos la subsistencia
como la caraza de un tesoro
que va acabando con nosotros.
Vivir es un gesto de tanto amor
que se va acumulando en una factura
de desvivir.
Estar es una escaramuza virtual,
con protagonismo y taquilla,
de probable ruina.
Ser, es tan profundo
que rompe la aparente superficialidad
de los cristales y de los sueños.
Asi existir es una perdida de tiempo
y una ganancia de luz,
un entusiasmo de ahora
y acaso una añoranza de mañana.
Una libertad sin filosofia
en la moderada relacion humana con uno mismo
que desaprende aprendiendo
y se encuentra extraviandose
en las cataratas de los ojos,
que entre mas ciegos
se consideran mas experimentados,
en una visión,
que por mucho,
no alcanza a leer los garabatos
dibujados en las sombras de las estrellas.